viernes, mayo 1

Los Mitos Solares de la Medicina 05 - El Sol de Justicia, el Sol del Mediodia

El Sol de Justicia, el Sol del Mediodía


El Sol, en su curso majestuoso, llega al culmen de su recorrido y desde allí se instaura en el juez y medida de todo. Su lugar equidistante de los extremos, del amanecer y del atardecer, le otorgan la capacidad de ser Juez y Señor de la Balanza

Los mitos médicos también se relacionan con este otro aspecto al que podríamos llamar la Salud Esplendente, la Armonía y Balance expresados por la Vida en todas sus manifestaciones. Estos aspectos se refieren más bien a los mitos de la Medicina en relación al mantenimiento de la vida, a la promoción de la Salud, a la prevención y mantenimiento del estatus de Salud, y al análisis de las razones profundas de la enfermedad: la falta de armonía, el desajuste, las consecuencias de la desobediencia a la ley como origen de la enfermedad.

En el Antiguo Egipto, Ra, el sol, es el dador de la vida, es quien rechaza toda oscuridad y quien hará que el candidato a la vida eterna, sano y fuerte, pueda acceder a su barca del día, navegando en el cielo por siempre. El osirificado, identificado con el mis­mo Ra, habla de sí mismo como habiendo sido sanado, curado, y liberado de todas sus enfermedades, es llamado también el “justificado”, aquel que ha saldado y ajustado todas sus deudas, todas sus contradicciones. En las fórmulas mágicas utilizadas en la medicina del antiguo Egipto, el enfermo también se identifica con el propio Osiris doliente, y como él aspira a ser curado y restablecido.

No sólo en el propio fundador de la civilización egipcia, Thoth, encontramos la idea de la balanza, del justo medio, sino también en su máximo representante desde el punto de vista de la medicina: Imhotep, el escriba y médico por excelencia en toda la tradición egipcia, pues porta en la esencia de su nombre esa misma idea, “El que trae la armonía”. Así la Medicina se contempla como la ciencia que restaura el orden primitivo e imperturbable de los primeros tiempos, de las primeras cosas, porque concilia los contrarios y armoniza las contradicciones, retornando a la Justicia primera.
Hygea
En Grecia, el mito de Asclepios se expande también a través de sus herederos, frutos de su madurez: así Higea, la diosa de la salud y de la higiene, representa ese otro aspecto brillante de la salud, de la armonía y la pureza. Sus propios símbolos, como el cuenco que lleva imitando la forma redondeada del Sol, su cabellera plateada, su asociación a las fuentes de agua pura y al aire limpio, invitan al concepto de la armonía natural, basada en una justicia primordial y luminosa. Platón se hace eco de esas ideas cuando en su República hace recurso frecuente a la Medicina, por vía de comparación, para ejemplificar su concepto de Justicia, eje central de este diálogo platónico.

Apolo y las Musas
Apolo, representa también en parte ese aspecto de Sol esplendente de Justicia, del Armonizador. Después de encole­rizarse con Zeus porque este había matado a Asclepios, se vio condenado por el supremo dios olímpico a un “castigo” ejemplar: introducirse entre los hombres para enseñarles. El pues, acompañado por las Musas, representa desde entonces la tarea solar de traer la luz, el orden y el conocimiento a los hombres. Junto con su hermana, Artemisa, diosa relacionada con la Luna, y contra­parte femenina de él mismo, representa también el necesario aspecto justiciero del orden que imponen sus actos y enseñanzas. Así, con sus dardos, Apolo determina la muerte y el castigo, al mismo tiempo que promociona la Salud, las Artes y la Armonía. Su hermana, Artemisa (“Curación”) le secunda en su tarea, es la terrible diosa ejecutora y vengadora, como así mismo la generosa protectora de sus amados y de los nacimientos. El Orden, la Balanza, necesariamente conllevan la idea de Justicia y de compensación redistributiva o karma.


En Egipto, encontramos un eco de las anteriores ideas en la diosa leona Sejmet, considerada la creadora de las epidemias y de las causas de la enfermedad, sus flechas kármicas alcanzan a todos con el dardo de la muerte, pero también ella es la diosa Poderosa y Protecto­ra, la diosa de la Medicina y de los Cirujanos, la que concede el poder de alejar la enfermedad y la muerte, la Señora del Rayo Verde

Continuará